La mujer rural, que alimenta al Ecuador, en el mayor olvido antes y durante la pandemia
Por Susana Morán
En el campo, la salud pública pasó de ser deficiente a desaparecer durante la emergencia. Las mujeres rurales –que ya tenían una gran carga laboral– han cuidado a sus enfermos y de la educación de sus hijos. Pero han donado los productos de sus fincas, mientras que el Gobierno ha sido un gran ausente para ellas. El programa Súper Mujer Rural apenas ha entregado ocho créditos. Las brechas en el campo han sido históricas y la pandemia las acentuará, según expertos.