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News & Events Y la agricultura peruana, ¿pasa hambre?
Y la agricultura peruana, ¿pasa hambre?
Y la agricultura peruana, ¿pasa hambre?
papa
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Por: Miguel Pintado Linares

Las recientes declaraciones de dos ministros han puesto el tema del hambre en el tapete y no precisamente por su gravedad en el país, sino por su supuesta irrelevancia. Afortunadamente, diversas voces se levantaron a aclarar el tema y posicionar el problema del hambre en el lugar que se merece en la agenda nacional. La reciente citación a la comisión agraria de uno de estos ministros revela que el tema alimentario no solo es de preocupación nacional, sino también muy complejo, pues a pesar de las notables reducciones de la pobreza durante el presente siglo, la incidencia del hambre permaneció casi inalterada. Precisamente, la última Encuesta Nacional de Hogares da cuenta de que la incidencia del hambre en el país sigue muy alta (más del 30%) y sin signos de recuperación.

En el caso particular del sector agrario podría pensarse que la situación es distinta, pues parte del acceso a los alimentos depende de propia producción familiar y no solo de los ingresos, lo cual podría generar cierta resiliencia al problema alimentario; sin embargo, sabemos que la mayoría de nuestros agricultores son pequeños productores y agricultores familiares, muchos de los cuales operan en condiciones de subsistencia, vulnerabilidad y pobreza con lo cual los problemas alimentarios podrían estar más presentes que ausentes. Para verificar estas sospechas, analizamos el estado y evolución del hambre en la agricultura durante los últimos cinco años. Tres hallazgos importantes y a la vez preocupantes.

Primero, pese a ser un sector productor de alimentos, casi la tercera parte de la población agropecuaria pasa hambre en el país. Segundo, la situación alimentaria es aún más crítica en la agricultura de la sierra, principalmente de las zonas norte y centro, en donde la incidencia del hambre llega inclusive a casi el 40% de la población proveniente de hogares agropecuarios. Por último, durante los últimos cinco años, la situación del hambre en la agricultura ha empeorado de manera generalizada tanto en la costa, la sierra y selva del país. Esto ha significado que más de medio millón de personas en la agricultura (alrededor de 170 mil familias) pasen a una situación de hambre.

Mientras esto ocurre en el campo, las políticas y beneficios agrarios siguen orientados hacia un pequeño segmento de la agricultura peruana, en tanto los principales responsables de la oferta de alimentos en el país (la pequeña producción, la agricultura familiar, etc.) siguen operando no solo bajos condiciones precarias, de subsistencia y con poca presencia del Estado, sino ahora también en condiciones alimentarias cada vez más deplorables.

[*] Un desarrollo más exhaustivo de esta nota será publicado en el próximo número de la Revista Agraria (N° 207)

Foto: FlickrCC BY 2.0

Noticia publicada originalmente en el sitio web de Cepes